En primer lugar, debes entender que el buzón de correo electrónico funciona exactamente igual que el buzón de correo de nuestra casa, es decir, si no recojo el correo habitualmente, llegará un momento en que nuestro cartero no podrá introducir ningún correo nuevo, nuestro buzón estará lleno.
Cuando configuramos un correo electrónico, en general, hay dos formas básicas de hacerlo: usando protocolo IMAP o usando el protocolo POP.
¿Que diferencias hay entre IMAP y POP?
Básicamente, cuando usamos POP, lo que ocurre es que nuestro programa (ya sea Microsoft Outlook, Mozilla Thunderbird o nuestro móvil), descargará el correo a nuestro terminal y eliminará el correo del servidor (del buzón), dejando espacio libre para que entren nuevos emails.
Cuando usamos IMAP, lo que ocurrirá, es que descargaremos una copia del email recibido, dejando el original en el servidor (en el buzón).
Recomendamos usar el protocolo IMAP. ¿Por qué? De esta forma, si tenemos un móvil y un ordenador, ambos dispositivos tendrán los correos electrónicos y podremos consultarlos estando sentado delante de nuestro ordenador o a través de nuestro móvil.
Si usáramos POP, el primer dispositivo que acceda al servidor, obtendrá una copia del correo, eliminando del servidor el correo.
Ventajas e incovenientes
- IMAP
- Ventaja: Puedo acceder desde distintos dispositivos a mi servidor de correo.
- Inconveniente: Si no elimino o archivo mis mensajes del servidor de correo (del buzón), este se llenará y no podré recibir más correos.
- POP
- Ventaja: El buzón se vacía automáticamente cada vez que leo un correo en mi dispositivo (ordenador, móvil, …)
- Inconveniente: Si uso diferentes dispositivos para leer el correo (móvil, ordenador,…) el primer dispositivo que acceda al buzón del servidor, será el que obtenga el correo.
